Home > Qué es la fisura labio-palatina

Fisura significa “división” o “separación”. Durante los primeros meses del embarazo las distintas áreas de la cara crecen de manera individual y después se juntan. Si algunas partes no se unen bien el resultado es una fisura, cuyo tipo y gravedad varía.

Diagramas de la fisura labio-palatina
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Fisura labial

La fisura labial es una anomalía que provoca una abertura en el labio superior entre la boca y la nariz. La apariencia es la de una división en el labio. Puede variar desde una pequeña muesca en la parte coloreada del labio hasta una separación completa en uno o dos lados del labio extendiéndose hacia arriba hasta llegar a la nariz. Una fisura en un lado se denomina fisura unilateral. Si la fisura está presente en los dos lados se denomina fisura bilateral.

Asociada a la fisura labial puede haber también una hendidura en la encía. Puede ser desde una pequeña muesca en la encía a una división completa de la encía en partes separadas. Las fotos del “antes’ y el “después de la cirugía” que aparecen a continuación son de una niña con fisura unilateral completa del labio y hendidura parcial de la encía.

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Fisura palatal

La fisura palatal aparece cuando el paladar de la boca no se ha unido por completo. La parte posterior del paladar (hacia la garganta) se llama paladar blando y la parte frontal (hacia la boca) se conoce como paladar duro. La lengua dentro de la boca nos permite notar la diferencia entre el paladar duro y el blando. La fisura palatina puede ser desde una simple abertura en la parte posterior del paladar blando hasta una separación completa del paladar (paladar duro y paladar blando).  En algunas ocasiones un bebé con fisura palatina puede tener la mandíbula pequeña e incluso algunos niños con esta combinación pueden llegar a tener dificultades para respirar con normalidad. Esta anomalía se conoce como secuencia de Pierre Robin.

 

Cómo se produce?

La causa de las fisuras no se conoce muy bien y la Organización Europea para el Estudio y Tratamiento de la Fisura Labio-Palatina participa en proyectos de investigación para trata de determinar por qué se producen.  Aunque sabemos lo que ocurre, no sabemos por qué.  Algunas veces las fisuras en el labio y/o paladar afectan a toda la familia y otras veces un bebé nace con dicha fisura sin que nadie más de su familia la haya tenido. Una consulta con el genetista puede dar alguna indicación sobre las posibilidades de que un niño nazca con fisura labio-palatina si alguna otra persona de la familia tiene esta anomalía. Por lo general,  si uno de los padres tiene una fisura, las posibilidades de que un bebé nazca con ella es de 1 en 30.

 

Mi bebé está sano?

A algunas personas les preocupa que la fisura labio-palatina pueda asociarse con dificultades en el aprendizaje, enfermedades del corazón u otros trastornos.  Aunque esto puede ocurrir, es muy poco frecuente.  La mayoría de los bebés que nacen con fisura labio-palatina están perfectamente sanos. Puede esperarse que estos niños tengan las mismas enfermedades infantiles que cualquier otro niño y dichas enfermedades no estarán relacionadas con la fisura.
 

Cómo le afectará a mi niño?

CleftPicture3Aunque la fisura no es una anomalía que tenga probabilidades de afectar a la salud de su niño en general, puede que necesite más estímulo y apoyo que otros niños en algunas áreas:

Alimentación:  la mayoría de los bebés con fisura labio-palatina pueden comer perfectamente, aunque algunos pueden necesitar algo de ayuda. Si su bebé tiene fisura palatina, puede que al principio tenga algunas dificultades.  Una enfermera especializada podrá ayudarle con este tema y quizá le hablen de un biberón y tetinas especiales.

Desarrollo del habla: algunos niños con fisura palatina tienen dificultad cuando empiezan a hablar ya que el aire puede escapar por la nariz. Esto ocurre porque el músculo del paladar no trabaja exactamente como debería. Generalmente estas dificultades se superan con la intervención temprana de un logopeda. En algunas ocasiones puede que sea necesario realizar otra operación para asegurar que el paladar funciona adecuadamente.

Audición: algunos niños con fisura palatina pueden experimentar dificultades temporales en la audición como resultado de un exceso de fluido en el oído medio (otitis media).  Se examinará la audición de su niño para comprobar si esto está ocurriendo. La mayoría de las dificultades de audición desaparecerán a medida que su hijo crezca.

Dientes:si su hijo tiene fisura palatina, puede que no tenga suficiente espacio para que los dientes crezcan a medida que se va haciendo mayor.  El ortodoncista realizará un seguimiento del desarrollo de los dientes y se asegurará de que están colocados correctamente.

Apariencia en general: :  la fisura varía en tamaño y gravedad. Esto significa que dos niños que nacen con fisura pueden ser muy diferentes uno del otro. Por lo general, la fisura en el labio es bastante evidente en un recién nacido y este bebé tendrá un aspecto muy diferente al de un recién nacido que no tenga ninguna fisura hasta que se realice la operación para cerrarla, lo que probablemente ocurrirá cuando el niño tenga 9 meses.  Aunque actualmente la cirugía es muy precisa, siempre quedará alguna cicatriz visible. A medida que su niño crece, usted puede ayudarle a sentirse cómodo con su aspecto. A los niños puede afectarles bastante tener una apariencia solo algo diferente a los demás. Pueden llegar a ser especialmente conscientes de ello cuando comienzan a ir a la guardería y después al empezar el colegio. Cuánto más capaz sea usted de responder a las preguntas que pueda tener y de atender a cómo se siente a medida que vaya creciendo, más probable será que dejen de preocuparse por su aspecto.

Su niño será tratado por algunos o todos los especialistas médicos siguientes:

  • Cirujano
  • Enfermera especialista
  • Ortodoncista
  • Pediatra
  • Logopeda y terapeuta del lenguaje
  • Psicólogo/orientador
  • Genetista

La cirugía para cerrar la fisura del labio se realiza normalmente durante los primeros 9 meses de vida del bebé. La cirugía para tratar la fisura del paladar se realiza en diferentes momentos según los protocolos vigentes a nivel local pero debería estar finalizada cuando el niño tenga 2 años, y a menudo se completa mucho antes. Puede que sea necesario realizar más operaciones a medida que el niño crece y es común que se realice una nueva operación cuando el niño tiene entre 9 y 11 años para colocar los dientes definitivos.